Viaje hacia la motivación

Dedicado a los que trabajan para un #ReiniciaEspaña.

Hoy es el día. Vas a emprender el viaje. Sabes que hasta hoy, es el viaje más importante que has realizado. Te has cansado de seguir durante toda tu vida, lo que dictaban para ti los demás. “Tienes que.. Deberías hacer… Eso no lo hagas, eso será imposible…”.

¿Y a dónde te ha llevado? A sentir que esa no era la vida que querías. Que los demás habían elegido por ti, que era hora que eligieras tú la vida que siempre has soñado.

Y has elegido lo que quieres, emprender el viaje hacia tu visión

La gente al saber tu intención de partir, intenta disuadirte, te recomiendan que te quedes en casa, que estás mejor. Tienen miedo que te pase algo, te dicen que te enfrentarás a olas gigantescas, a los dioses del mar, a pulpos enormes.. Todo para que no hagas algo, que a ellos les gustaría estar en tu lugar.

Pero tu vida ha sido hasta ahora pura rutina, y en la rutina, no se crece. El éxito sabes que está fuera de lo que alcanza tu vista, fuera del puerto en el que te encuentras. No solamente lo sabes, sino que desde hace tiempo te acompaña, el loro “Motivación”. Te lo encontraste paseando tu tristeza por la playa, y desde ese día sólo ha hecho más que alentarte a que te superes, ha restablecido la comunicación que tenías dañada con tu corazón, ha aumentado la confianza en ti mismo. Sólo puedes darle las gracias.

Los demás te hacen sentirte como un pirata. Y así te sientes. Un pirata que va a descubrir nuevos puertos, sitios jamás descubiertos hasta ahora . Lugares con los que sueñas, que sabes que te están esperando.

Toda tu gente ha ido a despedirte. Se dicen entre murmullos que no lo conseguirás, que volverás pronto, con la cabeza gacha. Te miran desde el alto del faro. Aunque te dan ánimos, lo que desean es que fracases muchos de ellos.

Te da igual. Te consideran un pirata, un loco y a mucha honra te sientes así. Con tu loro “motivación”, no te hace falta más. Sabes que lo conseguirás.

Te embarcas en una pequeña barca. Si lo piensas, sabes que no durara mucho si te encuentras alguna tormenta, tiene poca estabilidad. Es lo de menos para ti. Tienes tu visión en lo que sueñas. No importa el cómo, importa el qué. Y eso lo sabes.

El viaje ha comenzado. No echas la vista atrás, sabes que muy pocas personas confían en ti, en que lo conseguirás. A muchos de ellos, al convertirte en un pirata, ya no te hablan, no quieren juntarse contigo. Te has salido de los cánones que establece la sociedad. Eres un raro. No te importa. Te importa tu motivación y te dice al oído que lo vas a conseguir. Y sabes que así va a ser.

Eres un pirata inconforme, ya valía de tener un presente tranquilo y rutinario. Querías riesgo. Sabes que en las tormentas en cuando sacarás el título de Pirata mayor, en la calma, no.

No te hace falta un mapa, “Motivación” te guía. Sabes que tienes que ir más lejos más allá que lo que tus ojos te dictaminen.

Va transcurriendo el viaje. Como delfines que acompañan a los barcos, se te acercan, tres delfines, “ilusión” ( que desde el comienzo del viaje, está a tu lado ), “Perseverancia” y “ Fe”.

Los tres junto a “Motivación”, hacen que tu barca, vaya mucho más rápido que cualquiera de los barcos que has visto jamás.

Llegan las noches. Y como todo buen pirata, tienes tu cuaderno de bitácora. Escribes como te sientes, lo que vas a observando por el camino, que te reportan durante el camino, tus compañeros de viaje. Escribes línea tras línea, sabes que mantener una conversación positiva contigo mismo, es imprescindible si quieres llegar a buen puerto. Sabes que una conversación así, alentadora, te hará mantener a “motivación” junto a ti y juntos superar límites, miedos irracionales, que si no sería imposible.

Además estás descubriendo cosas que no sabías de ti. No sabías que podría hacer nudos marineros, que podrías hablar otros idiomas cuando arribabas la barca en otros puertos.. La motivación te ayuda a descubrirte, a sacar a la luz, herramientas que no sabías que tenías y que utilizas muy bien.

Aprovechas todas las horas del día y de la noche, por ya para tu sueño. Motivación hace que saques energía de donde crees que no habría

Motivación está muy contenta contigo. Estás consiguiendo pequeños éxitos. Y por ello te ha dicho, que siempre los consigas, tienes que recompensarte. Hoy te espera un gran pescado asado, que quieres devorar mientras escribes.

Pero mientras escribes, empieza a tambalearse la barca. Sales a ver qué está pasando. El timón ha desaparecido. Las velas están rotas, estas a la deriva. Y ves que con cada comentario tipo: “Ya no lo conseguiré, va a ser imposible salir de esta, tenían razón, no valgo para esto.. Tendré que volver”.. Motivación se marcha más y más a través de la tormenta.

La barca se mueve, se tambalea, entra más y más agua. Estás a punto de tirar la toalla, pero te acuerdas de un frase que te dijo un amigo antes de partir en el viaje: “Ante miedos, tormentas y dificultades, por favor, respira, la calma te dará la respuesta”. Es la última opción, por intentarlo que no quede.

Intentas respirar, aún así piensas que ya está todo perdido. Intentas relajarte. Y por arte de magia, el mar empieza a despejarse. Otros verían que siguen embravecido, pero tú ves una salida a la tormenta. Te encaminas a ella. Motivación vuelve a ti, estás contento.

Te dice que nunca vuelvas a desconfiar de ti, que nunca vuelvas a romper la línea que tenías con tu corazón, con tu intuición. Porque habías perdido el foco en tu sueño, habían venido estas tormentas. Así que por favor, nunca pierdas la confianza en ti, en tu sueño y siempre alimenta tu motivación, siempre aliméntame, te dice mientras se vuelve a reposar en tu brazo.

Un fracaso es la experiencia más importante que uno puede vivir. La más gratificante, la que más aprendizajes nos puede dar. Y sobre todo, si la exprimimos, es la que más rápido nos lleva a alcanzar superar más allá de lo que tus ojos pueden observar. Así que no tengas miedo al fracaso, te dice “motivación”, mientras se duerme en tu hombro.

Es un nuevo día, “ilusión” “perseverancia” “fe”, están a tu lado. Te animan a seguir el camino. Seguir lo dictado por tu motivación.

El camino se abre ante ti, porque sabes el qué quieres, el cómo se descubre.

Muchas veces conseguirás llegar a tu meta, otras no. Otras te llevarán a otro lugar totalmente diferente al que te imaginaba al salir de puerto. Pero siempre ten en cuenta una cosa, la motivación dirija tu vida y siempre te encaminará a un lugar en el que importa más el nosotros, que el ser individual.

Hoy quería contar una fábula que me contó hace muchos años, en mi niñez una persona muy querida para mí. Una fabula que llevo siempre conmigo en este viaje llamado vida. Una historia que me ha hecho salir de puertos que me hacían sentirme “muerto”; llegar a puertos que me han hecho “feliz”, conocerme , descubrirme y sobre todo alcanzar puertos inimaginables para mí.