Estudios del Reino Unido y de Estados Unidos recogen que el número de periodistas transformados a ejecutivos de comunicación –Public Relations (PR), Press Officers, DirCom- se ha multiplicado en los últimos años. En este artículo trato de argumentar por qué nuestro sector es también colaborativo y cuál es la mejor estrategia comunicativa empresarial hoy día.
El panorama periodístico español ha sufrido los achaques de la crisis. Han cerrado suplementos de diarios, periódicos enteros o programas de televisión, y lamento decir que conozco a periodistas, y pienso en concreto en especializados en radio que serían futuros “Luis del Olmo” o “Gemma Nierga”, pero que ya no quieren ser periodistas. El mundo nos ha tratado mal. Mientras nos pasa lo malo, tenemos también algo que celebrar en este sector: nacen nuevos medios, la mayoría online, otros digitales que recuperan edición en papel, gracias a que, no lo olvidemos, la sociedad sigue reclamando –necesitando- la información.
Tanto los periodistas que nos cuentan y publican sus historias, como los que están en los gabinetes de prensa, y me incluyo, sufrimos un síndrome aún sin nombre: querer ser los primeros en Twitter, los selfies en los eventos como si no hubiera mañana, nuestra firma antes que el titular… Por suerte algunos se escapan del postureo, y lo hacen bien. Esta misma semana Elvira Lindo elogia a Ana Blanco y sus 25 años en TVE por ello.
¡Ojo! Soy defensora de usar esas herramientas online, pero sin esa sobredimensión. Precisamente, las nuevas formas de comunicar es lo que está trayendo a este sector otra naturaleza, que la convierte en más colaborativa. El Cuarto Poder ya no es poder por sus cabeceras o nombres sino por su capacidad de generar credibilidad. Y ya no sabemos si es cuarto, quinto o tercero. Pero no importa. Existe hoy día más interacción, altruismo, contacto directo, desvirtualización, y otro periodismo acorde con los tiempos que corren.
La comunicación colaborativa, por así llamarla, se inspira en las startups, en la innovación, en otras empresas que también han tenido que renacer, en el mercado mismo. En agencias de comunicación, notar ese rendimiento nos lleva a descubrir que una nota de prensa sola ya no vale. Así como para el periodista una información sin actualidad o no contrastada no la va a poder publicar.
Storytelling empresarial
Las empresas que quieran comunicarse con la sociedad a través de los medios de comunicación, los nuevos y los viejos, tienen que encarar la nueva era. Movernos en un mar de datos de nuestra microeconomía no sirve de nada a la hora de comunicar si no los ponemos en orden. La Comunicación también es requerida para dar forma a nuestro dossier empresarial.
Un ejemplo de todo ello es Barcinno, una plataforma que da vida al ‘storytelling’ de empresas, y que lleva su estrategia de marketing al mercado internacional. Tal vez debemos empezar por contar la historia de la empresa y mostrar lo que es y lo que hace, si se dedica a la tecnología o al turismo, o si ofrece empleo. En otras palabras, crear contenidos noticiables y darle proyección en los canales apropiados.
Estamos ‘sobrepreparados’ para trabajar y somos muchos en el sector PR. Es cierto. Lo dicen, como me refería al principio, estudios internacionales; en España no he encontrado un dato que lo ratifique, pero solo hay que mirar ahí fuera. O echar un ojo al canal web de PRNoticias para ver más de esta profesión.
Consejos desde Boston
Este verano, en un viaje a Boston, tuve la suerte de que una referente en Comunicación para empresas estadounidenses, Jodi-Tatiana Charles, CEO de Brandographer y La Capoise Galerie, me diera una charla privada sobre este tema durante 45 minutos. Y lo resumo en una palabra, bueno, con un ‘phrasal verb’: Stand out. Y mientras colaboramos los unos con los otros, ese es el secreto para fabricar cualquier estrategia comunicativa. Diferenciémonos pero siendo nosotros mismos, con profesionalidad y con equipos únicos.
Sobre la Autora:
Marta Aguilar, periodista y especializada en Comunicación empresarial.
@onbdn
