Hace unos días, Mercadona presentó los resultados de 2015. Es un evento que suele tener cierta repercusión, porque es una de las pocas ocasiones en las que su presidente, Juan Roig, para mí uno de los empresarios estrella de nuestro país, sale a hablar en público. La última perla, que prefieren la agilidad a ser grandes. Aviso a navegantes.

En cuanto al negocio, sigue a velocidad de crucero. Aumento de cifra de negocio en un 3%, aumento del volumen vendido en un 5%, reducción del ticket medio (lo que Mercadona llama el carro – menú) en un 2%.Y un aumento del beneficio en un 12%. ¿De dónde vienen estas diferencias? Pues de la innovación. Así de claro. Permítanme explicarme.

Como esto es España y apuntaría Arturo Pérez Reverte, la envidia es el deporte nacional, en las redes y varios colectivos tras la presentación hubo críticas para todos los gustos.

• Que si explotan a sus trabajadores
• Que si aprietan hasta asfixiar a los interproveedores
• Que si los productos Hacendado son muy malos…
• Que si no hay variedad….
• Que si en cuanto una marca saca algo les copian enseguida…
• Que si es solo para amas de casa…

Pues muy mal no lo tienen que estar haciendo, porque facturan más de 20.000 millones de euros y están creando auténticos “fans” de sus marcas blancas. Que levante la mano la persona que nunca nunca ha entrado en un Mercadona a comprar, aunque sea una barra de pan. Pero claro, esto es España y nos encanta criticar al que va bien.

De hecho, Juan Roig encargó un estudio al Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas para demostrar que el impacto que tiene Mercadona y su cadena agroalimentaria sostenible es enorme: 1,8% del PIB nacional, 3,8% del empleo (640.000 empleos en toda la cadena) y 16.000 millones de euros de inyección a la economía en compras realizadas en España.

Mercadona no compite en la champions pero sus interproveedores sí

Sin embargo, Mercadona no compite en la champions. Con un 20% de cuota de mercado en España, los tímidos intentos de salir al exterior llevan en el congelador varios años. Es como si el Barcelona de las últimas temporadas, que se pasea por la Liga Española de fútbol (muy a mi pesar) no jugara la Champions League.

En 2017 Mercadona habrá llegado a todas las provincias españolas en su estrategia de mancha de aceite y ya veremos cuál su siguiente paso. En cambio, Mercadona realmente es un tractor importantísimo en el desarrollo del sector agroalimentario español, e incluso en el fomento de la innovación propia y sus interproveedores, liderando un cluster industrial de 240 fábricas.

Es un ejemplo destacado de funcionamiento de un cluster industrial, que aparece en primera posición nacional del The Cluster Observatory de las regiones innovadoras. En este cluster agroalimentario, formado por muchas pymes, la innovación no es fundamental. Es crítica. Los interproveedores de Mercadona invierten el doble en innovación que la media de las empresas españolas. De un 1,08% de inversión media al 2,68%, con datos de 2014.

De hecho desde el propio Mercadona, se les exige constantemente innovar. Y esta “presión” les está permitiendo prepararse para ser más competitivos.  Según el último informe anual de la empresa, los interproveedores han invertido en el último año 525 millones de euros en nuevas fábricas y líneas de producción más eficientes.

Gracias a esta apuesta por la innovación, algunos de los interproveedores sí que están saliendo al exterior con éxito, bien como fabricantes de marca blanca en otros países (el sello “interproveedor de Mercadona” pesa mucho en el sector de la distribución) o bien incluso con sus propias marcas.

¿No podría ser este un modelo de acompañamiento a seguir para fomentar la innovación en el empresario español?

Cómo funciona la innovación en Mercadona

La innovación en Mercadona está en su ADN. El apoyo del lidearazgo es claro y definitivo, como lo demuestra Juan Roig en sus apariciones públicas. Pero también con la asignación de recursos y la exigencia continua de innovar.

La definición de innovación de Mercadona es propia y diferencial. Ellos hablan de I+D+doble i. Esa doble “i” representa “innovación” e “inversión”. Tienen absolutamente clara la importancia de invertir recursos económicos como requisito previo para conseguir resultados por la innovación. ¿Cuántas empresas tienen asumido esto?

Incluso, visualmente, la innovación es importante. Y ese mensaje cala. En las memorias anuales de la empresa, la innovación tiene un apartado destacado, justo al principio, como eje transversal a todas las políticas.

Quizás no sea especialmente “vistosa”, pero la innovación de Mercadona es muy robusta. Tanto como aparecer destacada por el Boston Consulting Group en su libro “Rocket, 8 lessons to secure infinite growth”.

Permítanme hacer una breve disección de cómo es la innovación de Mercadona, para sacar algunas lecciones que puedan aplicar el resto de empresas.

1.- Estrategia de innovación

El mayor foco en su innovación es en procesos y logística. Casualidad o no, igual que Inditex, otro de los grandísimos referentes españoles. Llevo tiempo pensando que los españoles somos buenos en la intermediación y la logística

La innovación en Mercadona se orienta a cuatro áreas:

• Innovación en procesos: Mejorar y optimizar la cadena de valor de la compañía para evitar costes innecesarios
• Innovación en concepto: Evolución constante del concepto de tienda, para facilitar y comodidad en la compra del “Jefe”
• Innovación tecnológica: Inversión constante de recursos en tecnología para agilizar al máximo la toma de decisiones correctas y simplificar los procesos
• Innovación en producto: Desarrollar productos con una experiencia de consumo impecable, en colaboración con los interproveedores

En la cultura de Mercadona, el orden es importante. Por eso me parece muy importante que la innovación en producto aparezca al final, mientras que dos de las cuatro estrategias van orientadas a la optimización y costes

Conclusión: saber qué es innovación, para qué se innova y dónde se innova

2.- El proceso de innovación

El proceso de innovación de Mercadona está claramente orientado a aportar valor al consumidor final. Aunque eso implique que el fabricante interproveedor tenga que cambiar su forma de hacer e incluso invertir.

El criterio de selección de ideas es muy sencillo: si no aporta valor real al consumidor (menor precio, mejor consumo, menores costes), se descarta. Cuando se habla de innovación en procesos del propio interproveedor, cada uno puede aplicar lo que considere en su casa, siempre que demuestre que hay ahorros detrás.

En cambio, para nuevos productos, existe un proceso de maduración, en el que las ideas que superan el primer corte (prescripción/compras) se prueban en alguna de un grupo reducido de tiendas, para comprobar si superan el corte de “un kilo/tienda/día”.

El origen de las ideas es fundamentalmente a través de los propios empleados de la compañía, que dentro de su modelo de Calidad Total es uno de sus funciones críticas: escuchar al consumidor y trasladar las ideas, además de fomentar las mejoras internas en los procesos, por ejemplo de tienda.

Otra fuente de ideas son los proyectos corporativos, lanzados siempre dentro de las estrategias definidas y con el mismo objetivo de satisfacer al consumidor. Especialmente centrados en toda la cadena logística, relaciones con interproveedores, eco diseño de tiendas o la transformación digital.  Y Mercadona tiene claro que el jefe estará satisfecho si el precio de su compra es más bajo, por eso su obsesión por la optimización y ahorro de costes.

Finalmente la última fuente de ideas es la Co-innovación. En este proceso de innovación en producto (recuerden, el cuarto por orden de prioridad) intervienen las tiendas (como fuentes de ideas), prescripción (su departamento de producto) y los interproveedores.

Para realizarlo, Mercadona cuenta con 12 laboratorios de co-innovación, en los que se han llegado a realizar más de 5.000 sesiones con consumidores. Design Thinking en estado puro.

Con todo esto, el propio modelo de negocio de Mercadona es, para mí, la gran innovación de la empresa. Un modelo en el que existe una colaboración muy muy estrecha con los 125 fabricantes interproveedores, para el desarrollo de sus marcas propias Hacendado, Deliplus o Bosque Verde. Y que es fuente de innovación continua. Y los clientes lo valoran de una forma extraordinaria, recomiendo leer este resumen de Expansión donde explica que una tesis doctoral revela las claves de éxito de la marca ‘Bosque Verde’

En otro post Roberto Espinosa hablaba de la teoría de la “rueda del retail”, un antecedente de la innovación disruptiva. Mercadona entró con precios bajos y los sigue manteniendo, fruto sobre todo de su modelo de negocio tan especial.

Conclusión: captar ideas de todos los frentes, aplicar la innovación abierta, especialmente con los usuarios y madurar y desarrollar rápido.

3.- La innovación en los interproveedores de Mercadona

Innovar para Mercadona no es fácil. Como toda gran empresa, tiene sus procesos definidos y tienes que entrar por allí. El interproveedor muchas veces ve que sus ideas se rechazan una y otra vez por el área de Prescripción y a veces sin explicaciones claras, especialmente en innovación en producto.

En más de una ocasión te encuentras en un proceso de iteración continua, sin feedback directo del consumidor final, porque se filtra desde Prescripción.  Y eso para el equipo de innovación del interproveedor es absolutamente desmotivante. Hablo por experiencia, tras trabajar con alguno de ellos. Y el problema es que la dinámica depende del coordinador de prescripción que esté a cargo de la línea de productos.

Pero si el fabricante ofrece soluciones reales, con el foco hacia el consumidor final, algunas se pueden aceptar. Cada año Mercadona cambia el 5% de las referencias por otras novedades.

Muchas de las recomendaciones de Mercadona a sus interproveedores van orientadas hacia la innovación en procesos y optimización de la cadena logística.  Sobre todo su gran estrategia “Cadena Agroalimentaria Sostenible de Mercadona” (CASPOPDONA), en la que se incorporan al sector primario. Mercadona ya no innova dentro de la empresa, sino también fuera (open innovation).

Otra historia es la de la gran marca que quiere introducir sus innovaciones en Mercadona. Según el último informe Radar de Innovación de Kantar, apenas el 10% de las innovaciones de las marcas se introduce en Mercadona, mientras que el 70% se introducen en Carrefour.

Conclusión: Aprovechar la potencia de las alianzas para innovar con ellos

4.- Resultados de innovación

Todo esto no tendría sentido si no se obtuvieran resultados. Y yo me quedo con tres:

• La reducción del precio del carro – menú: venden más cantidad a menor precio y con mayor beneficio. El sueño de cualquier empresario.
• La optimización de los procesos, que les ha llevado a aumentar el beneficio más que lo hacen las ventas.
• La renovación continua del surtido, con el lanzamiento de 400 novedades al año, 100 de ellas fruto de la co-innovación. Mientras que en las grandes marcas de alimentación apenas lanzaron 118 nuevos productos.

Conclusión: Los resultados de la innovación se tienen que traducir en la cuenta de resultados y no en bonitos titulares de prensa.

Este es el impacto directo de la innovación de Mercadona.  Suficiente para convencer a cualquier directivo de que la innovación es LA ESTRATEGIA de éxito.