“El tiempo es la moneda de tu vida. Es la única moneda que tienes, y sólo tú puedes decidir cómo gastarla. Ten cuidado no sea que dejes que otros la gasten por ti.” ~ Carl Sandburg, Poeta.
Seguramente has estudiado una carrera o has desarrollado un conjunto de competencias, gracias a las cuales conseguiste tu puesto de trabajo. Seguramente haces bien tu trabajo y te esfuerzas bastante para que los resultados sean lo mejor posible dentro de unos plazos no demasiado holgados.
Seguramente tratas de ser lo más productivo posible en tu vida profesional, aunque muchas veces no sepas muy bien como tratar con toda la información e interrupciones que suceden en tu trabajo. Seguramente, manejar todo eso adecuadamente implique a veces dejar a un lado tu vida personal. Al fin y al cabo, tu futuro, tu carrera y tu actual sustento dependen de la percepción que tengan de ti como profesional.
Seguramente confundes productividad empresarial con productividad personal.
No eres el único. Hasta hace unos años, nunca le había dado demasiada importancia a mi productividad personal. Es cierto que siempre he tratado de ser lo más eficiente posible en mi trabajo, pero no me preocupaba ser un desastre en mi vida personal. Supongo que es porque veía un beneficio económico en el primer caso que no veía en el segundo.
Ahora he de reconocer que fui bastante estúpido respecto a este tema. El beneficio principal de la productividad personal no es el dinero, sino el tiempo. A medida que he ido implementando GTD (Getting Things Done es una metodología de productividad personal que utilizo y recomiendo) en mi vida, tanto personal como profesional, he podido sentir sus beneficios y por fin me he dado cuenta de que el tiempo es el activo más valioso de mi vida.
A partir de cierta edad, todo el mundo entiende que es una buena idea invertir una parte de su dinero para asegurar un futuro mejor. Planes de pensiones, fondos de inversión, activos inmobiliarios… Cuando llegue el momento de jubilarte vas a tener mucho tiempo libre y querrás disfrutarlo al máximo. Perfecto.
Sin embargo, parece que no es tan evidente que hay un par de asuntos en los que tendríamos que invertir incluso con mayor énfasis.
Uno es la salud. Hacer ejercicio regularmente y llevar una buena alimentación es una inversión mucho más valiosa que el dinero. ¿De qué te servirá el dinero cuando te jubiles si no eres capaz de andar cien metros sin agotarte? Tu calidad de vida depende, principalmente, de tu salud. Tengas la edad que tengas, si todavía no haces deporte, empieza ya.
El otro es el tiempo. Mejorar tu productividad personal te proporciona más tiempo para disfrutar ahora, no cuando te jubiles. ¿De verdad vas a esperar a tener sesenta y tantos años para empezar a hacer lo que te gusta? Lo de trabajar toda la vida para empezar a vivir en la vejez es un modelo que no me niego a aceptar. Si gestionas bien tu tiempo puedes tener infinidad de micro-jubilaciones a lo largo de toda la vida. La vida debería ser una sucesión de ciclos de actividad y descanso. Los descansos son necesarios para renovar nuestra energía y el interés por las cosas.
Cuando te tomas en serio tu productividad personal, empiezas a dejar hacer cosas que no tienen mucho sentido y que antes hacías sin pensar. Te concentras en las tareas que tienen un mayor significado a nivel personal, las que te permiten cumplir objetivos y te llevan a alguna parte. Cuando aprendes a valorar lo que haces en función de su contribución a tus metas en vez de por el tiempo invertido, resulta que una jornada de trabajo productiva se puede reducir a 3 ó 4 horas. Eso es difícil de aceptar en una sociedad que premia más las horas de ocupación que la productividad en sí.
Pero de eso va la productividad personal. De hacer cosas importantes en vez de cosas urgentes sin mucho sentido. De hacer más cosas con menos esfuerzo. De no dejar que las circunstancias de otros dirijan tu vida. De tener más tiempo para ti. De disfrutar una vida más plena.
Nota: Todas las fotos vía Shutterstock
Sobre el Autor:
Francisco Sáez es el creador de FacileThings, una herramienta de productividad personal en la nube, y escribe habitualmente sobre productividad y GTD en este blog.
